Este montaje, dirigido por Juan Carlos Moyano y Misael Torres, integra lo teatral, lo plástico, lo musical, lo memorioso y lo sensible, para referirse a las emociones y a los sueños de un país que ha tenido que enfrentarse al drama de una historia violenta y contradictoria.
A partir de Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez, sus directores construyeron una metáfora escénica del conflicto armado interno que reúne dos conceptos importantes del mandato de la Comisión de la Verdad.
La palabra resurrección alude a la no repetición de la violencia. Y los condenados somos todos. En palabras de Misael Torres, “somos los hijos de Colombia, que nacemos con una cruz de ceniza en la frente. Pero, al contrario de lo que dijo Gabriel García Márquez, para nosotros sí hay una segunda oportunidad sobre la tierra”.
Este proyecto de la Comisión de la Verdad se realizó junto al Instituto Distrital de las Artes (Idartes), La Paz Querida y la Alcaldía Mayor de Bogotá.